Con los niños en casa, muchos papás y mamás han optado por ser los ‘chefs’, no obstante, sabemos que brindar siempre una cena diferente y divertida no es tarea fácil y, además, es muy común preferir formas más rápidas y económicas que cocinar.
Pensando en esto, UNICEF nos comparte alternativas prácticas, asequibles y saludables que favorecen el crecimiento y desarrollo de nuestra familia y, a la vez, contribuirán a establecer hábitos de alimentación saludables.
1. Sigue consumiendo frutas y verduras
Es importante asegurarse que la dieta de los niños incluya una cantidad suficiente de frutas y verduras. Por lo anterior, es fundamental comprar estos productos cuando estén frescos y almacenarlos; recuerda que pueden congelarse y así, conservan gran parte de su sabor y sus nutrientes. De igual manera, “si utilizas verdura fresca para cocinar sopas, caldos u otros platos en grandes cantidades conseguirás que duren más y tendrás distintas opciones para varios días. Además, también puedes congelar estos platos y recalentarlos rápidamente” nos explica UNICEF.
2. Si no encuentras productos frescos, sustituirlos por alternativas saludables, como los alimentos deshidratados o en conserva.
Recuerda: hay muchas alternativas saludables que puedes almacenar y preparar fácilmente. Por ejemplo, los frijoles y los garbanzos en conserva, que aportan abundantes nutrientes, pueden almacenarse durante meses e incluso años, y puedes incluirlos en tus platos de diversas formas. El pescado azul en conserva, como las sardinas, la caballa y el salmón, son ricos en proteínas, ácidos grasos omega 3 y una variedad de vitaminas y minerales. Puedes utilizarlos en frío, como, por ejemplo, en sándwiches, ensaladas o platos de pasta, o también añadirlos a platos calientes.
De igual manera, las verduras en conserva, como los tomates, suelen contener menos vitaminas que los productos frescos, pero son una buena alternativa si te cuesta encontrar productos frescos o verduras congeladas. También, los alimentos deshidratados, como los frijoles, las legumbres y los cereales deshidratados, como las lentejas, los guisantes partidos, el arroz, el cuscús o la quinua, también son opciones nutritivas y duraderas que, además, son sabrosas, asequibles y sustanciosas. Los copos de avena cocidos con leche o agua son una opción excelente para el desayuno, y puedes condimentarlos con yogurt, fruta troceada o pasas.
3. Mantén reservas de aperitivos saludables
Si tu hijo suele pedir refrigerio durante el día, evita darles dulces o aperitivos salados, cámbialos por opciones más saludables como frutos secos, queso, yogur (preferiblemente, sin azúcar), fruta troceada o deshidratada, huevos cocidos u otras opciones saludables disponibles en tu zona. Estos alimentos son nutritivos, sacian más y contribuyen a crear hábitos saludables para toda la vida.
4. Limita los alimentos muy procesados
Aunque sabemos que el ideal en nuestro hogar es utilizar productos frescos, la verdad es que no siempre es posible y optamos por incluir elementos procesados. Con respecto a esto, lo importante es intentar limitar la cantidad de estos alimentos. UNICEF nos dice “Los platos preparados y los postres y refrigerios envasados suelen tener un alto contenido de grasas saturadas, azúcares y sal. Si compras alimentos procesados, mira la etiqueta e intenta elegir opciones más saludables que contengan una menor cantidad de esas sustancias. Trata de evitar las bebidas azucaradas y, en su lugar, bebe abundante agua. Una buena forma de aportar más sabor al agua es añadirle frutas o verduras, como limón, lima, rodajas de pepino o frutos rojos.”
5. Haz que cocinar y comer formen una parte importante y divertida de la rutina familiar
Disfruta de tu tiempo en familia. “Cocinar y comer todos juntos es una forma excelente de crear rutinas saludables, fortalecer los lazos familiares y divertirse. Siempre que sea posible, invita a tus hijos a participar en la preparación de la comida: los más pequeños pueden ayudar a lavar o a organizar los alimentos, mientras que los mayores pueden asumir tareas más complejas y ayudar a poner la mesa” nos comenta UNICEF. Adicional a esto, nos sugiere ceñir horarios para que estos momentos hagan parte de nuestra rutina y contribuyan a reducir la ansiedad de los niños.
Asimismo, UNICEF nos comparte recomendaciones para la lactancia materna:
“La leche materna sigue siendo una excelente opción de alimentación para los niños de entre 6 y 24 meses en adelante. Las mujeres que padecen COVID-19 pueden seguir amamantando a sus hijos si lo desean. No obstante, deben cuidar la higiene respiratoria mientras lo hacen, llevando una mascarilla siempre que puedan, lavándose las manos antes y después de tocar al bebé y limpiando y desinfectando repetidamente las superficies que hayan tocado. Si no se encuentran lo suficientemente bien para amamantar a causa del virus o de otras complicaciones, las madres deben contar con ayuda para alimentar a sus recién nacidos con leche materna de la mejor forma posible.”
De igual manera, te compartimos los consejos generales de higiene alimentaria:
-Lávate las manos constantemente con agua y jabón durante 20 segundos como mínimo antes de preparar cualquier alimento.
-Utiliza tablas separadas para cortar carne y pescado crudos.
-Cocina los alimentos a las temperaturas recomendadas.
-En la medida de lo posible, mantén los alimentos perecederos refrigerados o congelados, y presta atención a las fechas de caducidad.
-Intenta reciclar o desechar los residuos y los envases de los alimentos de una manera higiénica y adecuada, evitando acumulaciones de basura que puedan atraer plagas.
-Lávate las manos con agua y jabón durante 20 segundos como mínimo antes de comer, y asegúrate de que tus hijos hacen lo mismo.
-Utiliza siempre platos y utensilios limpios.
Te invitamos a leer el artículo completo ingresando a: www.unicef.org/es/consejos-para-alimentacion-sencilla-asequible-saludable-durante-brote-covid19
Para complementar esta valiosa información el Hospital Alemán nos comparte 10 recomendaciones para una Alimentación Saludable:
1- Incorporar a diario alimentos de todos los grupos y realizar al menos 30 minutos de actividad física
2- Tomar a diario 8 vasos de agua
3- Consumir a diario 5 porciones de frutas y verduras en variedad de tipos y colores
4- Reducir el uso de sal y el consumo de alimentos con alto contenido de sodio
5- Limitar el consumo de bebidas azucaradas y de alimentos con elevado contenido de grasas, azúcar y sal
6- Consumir diariamente leche, yogur o queso, preferentemente descremados
7- Al consumir carnes quitarle la grasa visible, aumentar el consumo de pescado e incluir huevo
8- Consumir legumbres, cereales preferentemente integrales, papa, maíz o yuca
9- Consumir aceite crudo como condimento, frutas secas o semillas
10- El consumo de bebidas alcohólicas debe ser responsable. Los niños, adolescentes y mujeres embarazadas no deben consumirlas. Evitarlas siempre al conducirConoce el articulo completo en: www.hospitalaleman.org.ar/mujeres/10-recomendaciones-una-alimentacion-saludable
Por: Andrea Carolina Pedroza
Equipo de redacción de Los Mejores Jardines